Lactancia materna en público

El tema de la lactancia materna en público es un tema muy debatido. Desde «completamente natural» a «totalmente inmoral», todo el espectro de opiniones está representado en la sociedad. Como nueva mamá, me sentía insegura.

¿Cuándo puedo salir de casa con mi bebé? ¿Y si de repente tiene hambre? ¿Aparecerá algún estúpido o estúpida que dirá algo si amamanto a mi bebé en público?

Después de haber pasado por una lactancia lo sé: ¡los miedos no sirven de nada! Por supuesto que toma un poco de tiempo hasta que tú y tu bebé seáis un equipo de lactancia bien coordinado. Pero te aseguro que la soltura viene con la rutina, y en con la lactancia materna en público ocurre igual.

Al principio me escondía en los rincones oscuros de un restaurante, pero unas semanas después me encontré amamantando en un café de la calle.

¡Atrévete a salir! Estos consejos hacen que la lactancia materna en público sea un juego de niños.

Consejos sobre la lactancia materna en público
Lactancia materna en público

Consejos sobre la lactancia materna en público

  • Vístete de manera práctica: Ponte algunas cosas para facilitar la lactancia y protegerte de las miradas indiscretas.
  • Bufanda de lactancia: La bufanda protege al bebé para que pueda concentrarse. Si la bufanda no es necesaria para la lactancia, puedes llevarla alrededor del cuello como un accesorio.
  • Muselina para bebés: ¡Vale su peso en oro! Puedes ponerlo sobre tu bebé para amamantarlo y luego usarlo como una manta liviana, para acurrucarlo, para abrazarlo o como una pantalla de privacidad para el cochecito.
  • Camisetas de lactancia: Las camisetas con función de lactancia le permiten amamantar a tu bebé discretamente. Ahora mismo, hay incluso camisas y suéteres que se ven bien bonitos.
  • Encuentra un lugar tranquilo: También puedes amamantar discretamente en parques o cafés y que sea casi imperceptible.
  • Zonas de juegos: Aquí es donde los padres juegan con sus hijos. El lugar perfecto para amamantar. Encuentra un lugar tranquilo a la sombra y recuéstate.
  • El coche: Si te mueves en coche, tienes tu propia habitación privada contigo. En el aparcamiento, por ejemplo, está oscuro y no hay transeúntes que miren dentro del coche.
  • Farmacias: Algunas farmacias ofrecen habitaciones tranquilas para la lactancia.
  • Sala de lactancia: cada vez es más habitual encontrar en los centros comerciales y los grandes almacenes habitaciones discretas para ti y tu bebé.
  • Vestuario: ¿No hay ningún lugar discreto a la vista? Entonces pregúntale a la empleada de una tienda y seguro que te deja amamantar a tu bebé en el vestuario. Hasta ahora sólo he tenido una buena experiencia en este aspecto.
  • Cafetería: Lo ideal sería que eligieras un lugar en el que puedas encontrar otras madres.
  • Portabebés: ¡La práctica hace la perfección! Hay madres que amamantan a sus bebés en su fular o en su portabebés. Y con un poco de práctica, funciona muy bien.

Así que: ¡Ten valor y disfruta de la lactancia materna en público también!

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