El capazo es una opción muy práctica y segura para transportar a nuestro bebé durante los primeros meses de vida. Sin embargo, llega un momento en el que nuestro pequeño empieza a crecer y mi bebé no cabe en el capazo. Es en este momento cuando nos preguntamos: ¿Cuándo es el momento adecuado para cuando pasar al bebé de capazo a silla?
El capazo, con sus asas y capota solar, ofrece comodidad como una cuna portátil que puede ser llevada en las manos o montada sobre ruedas para mayor movilidad. Es posible también acoplar algunos modelos a la estructura de una silla de coche, dependiendo de su compatibilidad.
Existen modelos versátiles que sirven para múltiples propósitos, pero ¿cuándo cambiar el capazo por la silla? Te explicamos todo a continuación.
¿Cuándo es recomendable sentar a mi bebé en la silla de paseo?
¿Puede ir un bebé de tres meses en la silla de paseo? Depende de las características específicas de cada modelo. Algunas sillas están diseñadas para usarse desde el nacimiento, lo que permite un uso concurrente con el capazo.
Generalmente, se aconseja empezar a usar la silla cuando el bebé pueda sentarse por sí mismo, alrededor de los cinco o seis meses. Si tienes un capazo, es probable que quieras maximizar su uso, ya que están diseñados para soportar hasta 9 kg, peso que los bebés suelen alcanzar a los seis meses. El factor altura también es relevante.
Cuanto tiempo se usa el capazo varía entre modelos. Algunos pueden usarse hasta los 15 kg (aproximadamente tres años), y otros hasta los 22 kg o incluso 25 kg.
1. Cuando el bebé pueda sostener su cabeza perfectamente y mantenerse sentado
Uno de los principales indicadores de cuándo cambiar de capazo a silla es cuando nuestro bebé puede sostener su cabeza perfectamente y mantenerse sentado sin ningún tipo de apoyo. Esto es importante, ya que la silla de paseo no ofrece el mismo nivel de sujeción que el capazo, por lo que es fundamental que nuestro bebé tenga la fuerza y el control necesario para mantenerse erguido.
2. Cuando el bebé empiece a asomarse por encima del capazo o mostrar interés por ver el mundo que le rodea
Otro indicador de que nuestro bebé está listo para dejar el capazo es cuando empieza a asomarse por encima de él o muestra interés por ver el mundo que le rodea. Esto suele ocurrir alrededor de los 3 o 4 meses de edad, cuando el bebé comienza a desarrollar su curiosidad y quiere explorar su entorno. Si notamos que nuestro bebé se muestra inquieto en el capazo y quiere ver más allá, es un buen momento para pasar a la silla de paseo.
3. Cuando el bebé pida insistentemente que lo saquen del capazo
Si mi bebé llora en el capazo y pide insistentemente que lo saquen de él, es un claro indicador de que ya no se siente cómodo en esa posición y es hora de pasar a la silla de paseo.
Los bebés tienen sus propias formas de comunicarse con nosotros, y una de ellas es a través del llanto o la insistencia. Si notamos que nuestro bebé llora o se muestra inquieto en el capazo y pide insistentemente que lo saquemos de él, es un claro indicador de que ya no se siente cómodo en esa posición y es hora de pasar a la silla de paseo.
4. Cuando el capazo le quede pequeño y apenas pueda moverse
Es importante tener en cuenta el tamaño y el espacio que nuestro bebé tiene en el capazo. Si notamos que el bebé ya no tiene suficiente espacio para moverse con comodidad y se siente apretado, es un indicador de que el capazo le queda pequeño y es hora de pasar a la silla de paseo. Es importante que nuestro bebé tenga libertad de movimiento y pueda estirarse y moverse con facilidad.
5. Aproximadamente alrededor de los 6 meses de vida, aunque puede variar según el desarrollo de cada bebé
Si bien los 6 meses de vida es una edad aproximada para pasar a la silla de paseo, es importante tener en cuenta que cada bebé se desarrolla a su propio ritmo. Algunos bebés pueden estar listos para hacer el cambio antes de los 6 meses, mientras que otros pueden necesitar más tiempo. Es importante observar las señales que nuestro bebé nos da y adaptarnos a su ritmo de desarrollo.
6. No precipitarse y esperar unas cuantas semanas para asegurarse de que el bebé tiene la fuerza suficiente para mantenerse bien sentado
Por último, es importante no precipitarse y esperar unas cuantas semanas para asegurarnos de que nuestro bebé tiene la fuerza suficiente para mantenerse bien sentado en la silla de paseo. Aunque nuestro bebé pueda sostener su cabeza y mostrar interés por ver el mundo que le rodea, es importante darle tiempo para fortalecer sus músculos y adquirir la estabilidad necesaria para estar cómodo y seguro en la silla de paseo.
Pasos para cambiar del capazo a la silla de paseo
La decisión final recae en los padres, quienes mejor conocen las necesidades de su bebé tras observarlo detenidamente.
Si decides que tu bebé de cuatro meses está listo para la silla de paseo, aquí están los pasos a seguir:
- Asegúrate de que el bebé esté listo. Si puede mantenerse sentado o está aprendiendo, es un buen momento para hacer el cambio.
- Consulta con un especialista si tienes dudas, especialmente si el bebé no se mantiene sentado pero ya no cabe en el capazo.
- Ajusta correctamente la silla. El arnés y el reposapiés deben adaptarse al tamaño del bebé, y utiliza las posiciones reclinables adecuadas.
- Utiliza accesorios útiles, como cojines reductores, para hacer la transición más cómoda.
Ventajas de usar la silla de paseo
Conocer el momento adecuado para que un bebé se siente en el cochecito implica un cambio significativo. Las sillas de paseo ofrecen varias ventajas:
- Son más prácticas de usar, especialmente si el capazo no tiene ruedas.
- Favorecen el desarrollo del bebé al ofrecer una mejor visión del entorno y mayor libertad de movimiento.
- Son más ligeras y fáciles de transportar y almacenar debido a su diseño plegable.
- Permiten un uso prolongado, con modelos que soportan hasta 25 kg.
¿Qué silla de paseo es la mejor para mi bebé?
Elegir la silla adecuada implica considerar varios factores como dimensiones, peso, materiales y funciones adicionales. Define un presupuesto y selecciona la mejor opción dentro de ese rango.
En conclusión, la mejor edad para cambiar de capazo a silla es a los seis meses, cuando el niño puede mantenerse sentado, un logro que usualmente alcanzan a esa edad. Esto te permitirá aprovechar ambos productos al máximo.
El momento adecuado para pasar a la silla de paseo cuando nuestro bebé de 3 meses no cabe en el capazo es cuando pueda sostener su cabeza perfectamente y mantenerse sentado, empiece a asomarse por encima del capazo o mostrar interés por ver el mundo que le rodea, pida insistentemente que lo saquen del capazo, el capazo le quede pequeño y apenas pueda moverse, aproximadamente alrededor de los 6 meses de vida, aunque puede variar según el desarrollo de cada bebé, y no precipitarse y esperar unas cuantas semanas para asegurarse de que el bebé tiene la fuerza suficiente para mantenerse bien sentado.